Actúa ya y evita la temida cuesta de enero
En este momento del año, nuestra agenda está llena de compromisos de trabajo, citas familiares, comidas con amigos… El año se acaba y hay que dejar todo bien cerrado, celebrar lo bueno, olvidar lo malo y compartir un rato agradable con todos aquellos que nos han acompañado de una u otra manera.
Lo sabemos. Lo que menos apetece ahora mismo es pensar en enero, salvo que sea para posponer hasta entonces aquellos propósitos o tareas que no vemos el momento de emprender. Pero el caso es que, aunque no queramos ni oír hablar de la temida cuesta de enero, la única manera de desterrarla de verdad de vuestra vida es dedicar hoy algo de nuestro a tiempo a planificar y actuar ya mismo . Compartimos con vosotros algunos consejos empezar 2018 con buen pie y no arrepentirnos después.
- Elabora una lista de los gastos previstos para los meses de diciembre y enero y revísala teniendo claros tus ahorros y los ingresos que tendrás en el mismo periodo. Es el momento de anotar los gastos navideños y los extras –regalos, comida, ropa- pero no te olvides de los gastos corrientes – las facturas de la luz, el agua, el gas o el teléfono-.
- Si enfrentas gastos a ingresos y ahorros y la cuenta sale negativa, es la hora de eliminar de tu lista de la compra aquello que no es necesario o que puedas posponer para otro momento. Piensa con frialdad ahora que aún no estás en la línea de cajas.
- Evita comprar en plena temporada navideña. Puede que aún estés a tiempo de no pagar el máximo precio tanto en comida como regalos o adornos navideños. Los precios de todos estos productos de “temporada” suben como la espuma cuando se encienden las luces de Navidad.
- Compra sólo los alimentos necesarios. Estamos hartos de decir y oír decir que la Navidad es una época de excesos. Sobrepasar un poco el límite de lo diario es precisamente uno de los encantos de estos días pero no te vuelvas loco: tu cuerpo sigue siendo el mismo y tu estómago sigue teniendo el mismo tamaño. ¿Seguro que vais a comeros tantas tabletas de turrón?
- Piensa bien los regalos que vas a hacer. Cuando un regalo se hace de verdad, disfruta quien lo recibe y quien lo hace: es un juego de dos. No te dejes llevar por la inercia y piensa que un detalle bien pensado puede ser más impactante que algo con menos alma pero que deje tiritando tu tarjeta de crédito.
- Sé riguroso y no gastes en diciembre aquello que vayas a necesitar en enero.
Como veis, son consejos sencillos. La clave está no perder de vista el sentido común. Además, otro de los bienes más preciados que tendemos a desaprovechar en estas fechas es el tiempo. ¿De verdad, necesitas recorrer kilómetros para hacer tus compras de Navidad? Seguro que puedes hacerlo a la vuelta de la esquina. https:/onebusiness.place/es/