Trucos de ahorro para el día a día
El ahorro es con frecuencia la gran asignatura pendiente en todas las familias. Especialmente en ciertas épocas del año, como navidades, verano, o vuelta al cole, parece que se abre un agujero sin fondo en nuestros bolsillos y en ocasiones se hace difícil llegar a fin de mes.
Para hacer frente a nuestros gastos diarios, a los imprevistos que nos puedan llegar, y para poder darnos ese capricho que se nos va de presupuesto, es importante tener buenos hábitos de ahorro en nuestro día a día. A continuación, os presentamos algunos trucos, que, puestos en práctica con constancia, os darán bastantes alegrías al cabo del tiempo… vamos allá:
Conoce tus gastos
No se trata sólo de saber cuánto solemos gastar al mes, sino de entender cómo y en qué empleamos nuestro dinero, si se nos va la mayor parte en gastos fijos o si nos dejamos gran parte del presupuesto en ocio, por ejemplo. Para entender nuestros hábitos de consumo es buena idea llevar una pequeña contabilidad casera. Últimamente se ha puesto de moda el kakebo, un sistema japonés muy sencillo con el que podemos entender mejor en qué gastamos, y en qué podemos mejorar, aunque hay también múltiples apps a nuestra disposición con las que conoceremos mejor nuestro perfil de gasto.
Haz un plan de ahorro
¿Para qué necesitas ahorrar? A lo mejor te quita el sueño la vuelta al cole de todos los años o la cuesta de enero, o puede que necesites cambiar de coche… Sea lo que sea, planifica cuánto y cuándo necesitas ese dinero. De esta forma, podrás calcular mejor cuánto necesitas ahorrar cada mes para lograr tu objetivo.
Revisa los contratos de suministros y seguros
Seguramente te habrás dado cuenta de la cantidad de gastos fijos a los que hay que hacer frente cada mes. Sin embargo, aunque es imprescindible tener agua, luz, teléfono, seguros de hogar,… etc., siempre existe la posibilidad de cambiar de compañía o de renegociar nuestros contratos. Échale un vistazo a las condiciones y ofertas de la competencia, puedes llevarte una grata sorpresa y ahorrar una buena cantidad de dinero al cabo del año.
Ahorra en la cesta de la compra
Normalmente creemos que se puede ajustar poco en este apartado, pero nada más lejos de la realidad. Elige para tu compra habitual un supermercado cercano con buenos precios, y si tiene tarjeta de puntos, háztela. Antes de ir a comprar, elabora una lista, y no vayas a comprar con hambre. En casa, organiza tu despensa y tus comidas de forma que no desperdicies nada. Si tienes sobras de carne, prepara empanadillas, si te sobra algo de pollo, tienes una estupenda base para croquetas… es mas sencillo de lo que parece, y además de comer bien, ahorrarás.
Planifica tus vacaciones
En la medida de lo posible, planea con la mayor antelación posible tus viajes de ocio, y si son fuera de temporada, mucho mejor. Comprar billetes y reservar hoteles con tiempo nos puede suponer un ahorro exponencial en una de las partidas que más nos suele desequilibrar el presupuesto. Haz la prueba, entra en internet y busca precios para visitar ese lugar soñado una semana antes de que comience oficialmente la temporada alta del año próximo, o una semana después de que termine… te vas a sorprender.
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Usa bien tus electrodomésticos y aparatos domésticos
Este ahorro se nota a largo plazo, así que la constancia es fundamental. Modera la temperatura tanto en verano como en invierno, usa bombillas de ahorro energético, apaga las luces que no son necesarias, aprovecha el calor residual del horno y vitrocerámica para cocinar, no dejes los grifos abiertos más tiempo del necesario… todos estos hábitos son ecológicos y facilitan el ahorro, no los dejes de lado.
Compra una hucha
Sí, el método tradicional de toda la vida también funciona. Las vueltas, las monedas que aparecen en los bolsillos… al cabo del tiempo se pueden convertir en premio inesperado sin hacer un agujero en tu presupuesto. No hay oportunidad pequeña para el ahorro, si hay tiempo y constancia. Si quieres algo más “jugoso” y con vistas al futuro, habla con tu banco y revisa los planes de pensiones y de inversión que ofrecen, desde 30€ al mes puedes convertirte en un pequeño inversor y asegurar una rentabilidad para tu dinero.
Conclusiones
Como ves, hay muchas formas de estirar un poco más nuestros ingresos. Intenta ponerlas todas en práctica y recuerda, la constancia y tener un objetivo que lograr, son las claves para tener éxito en nuestra empresa… ¡Suerte!
Y si tienes un pequeño negocio, puedes conseguir visibilidad online gratuita para él registrándolo en One Business Place. No hay cargos ocultos, periodos de permanencia, ni letra pequeña… un granito más para contribuir en el ahorro 🙂