La importancia de una buena oficina
Poner en marcha un negocio es una decisión de gran importancia y son muchos los aspectos que tenemos que tener en cuenta. Hoy queremos hablaros del lugar de trabajo. Obviamente, cuando se trata de una empresa de interacción con el público, la ubicación la fijamos en nuestro top 3 de decisiones importantes. Por el contrario, si lo que vamos a poner en marcha es un proyecto en el que daremos servicio a otras empresas, hay una cierta tendencia a desatender el espacio en el que se desarrollará nuestro día a día. ¡Error! La elección de la oficina no debe de ser una decisión de segunda fila.
En primer lugar, es importante que el espacio de trabajo sea funcional y se adapte a nuestras necesidades de personal, espacio, y accesibilidad. Además, debe dar buena imagen y reflejar el espíritu, filosofía y valores de nuestro negocio.
En cuanto a la ubicación, es determinante elegir bien la zona de la ciudad en la que instalarnos, teniendo en cuenta aspectos como: una buena conexión con transporte público, fácil acceso con vehículo particular y posibilidad de aparcamiento. Si consideramos el tiempo como un bien escaso y de gran valor, optimizarlo en los desplazamientos propios y de nuestros clientes debe ser una prioridad. Por último, respecto a la ubicación, la cercanía y contacto con otras empresas relacionados puede generar nuevas oportunidades de negocio.
La oficina ideal, debe tener espacio suficiente para albergar todos los puestos de los trabajo y, si es oportuno, ofrecer cierto margen de maniobra para una futura re-estructuración. Para ello, es necesario realizar un análisis detallado de las necesidades presentes y futuras y tener en cuenta el número de personas que se va a recibir habitualmente para poder ofrecer en todo momento una buena experiencia de cliente durante la estancia en la empresa. En este ámbito, los requerimientos de mobiliario: puestos, equipos informáticos, electrónicos y demás material, también marcarán en gran medida las necesidades de espacio para poder desempeñar las tareas con garantía. El diseño de la oficina no se tiene que ver como un gasto sino como una inversión, ya que tener en cuenta que un ambiente laboral adecuado favorece la efectividad de los equipos de trabajo.
Queremos cerrar con el aspecto más importante y que os ayudará a definir los anteriores, el presupuesto: Alquiler de espacio, personalización y diseño, equipamiento, servicios básicos (red de alta velocidad, facturas de luz y agua, limpieza, licencias, etc.). Es imprescindible hacer un análisis minucioso para definir correctamente el presupuesto disponible y que permita garantizar todas las necesidades.
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